sábado, 26 de enero de 2013

Explotemos de una puta vez.

"Quien bien te quiere, te hará llorar" Nos estamos tomando muy a pecho esta frase. No sé exactamente qué está ocurriendo aquí, sólo sé, que un día está todo genial y al día siguiente todo se ha estropeado. Soy una mete patas lo sé. Puedo ser la más infantil, la más puta, la más fea, la mas estúpida, imbécil, egocéntrica, retrasada, anormal, gilipollas y subnormal que te puedes encontrar. Qué se le va a hacer.
Hace un año, la Celia que ahora mismo la gente conoce no era así, ni por asomo, sólo un par de personas saben cómo era y no por que lo contara, si no por experiencias, malas. Hasta hace poco, nadie se interesaba por alguien así, como yo. Hasta hace poco siempre fui la amiga, la que iba a acompañar, la que siempre estaba en la "free zone" Hasta hace poco. ¿Qué pasó? Que los patitos feos se acaban convirtiendo en un cisne y cogen demasiado poder, pude conseguir todo lo que quería, sólo con chiscar los dedos, abusé mucho de ese poder y acabé quemándome, pero no aprendí la lección. De esto, de la nada, casi por casualidad, alguien aparece, una persona con la que jamás había mantenido una conversación más larga de "Hola." Comienza a hablar contigo, te abre los ojos, te explica cómo son las cosas, hace que te des cuenta de todo y de repente cambias, como una bomba que hubiera estallado. Tal vez él no se de cuenta, porque anteriormente no me conocía y no podría hacerse una pequeña idea de cómo era, es imposible. Puede que él no lo vea, puede que sólo vea esa cría llorona, pero debajo de esa forma de ser hay otra persona dentro, un alma de luchadora, inmune a los golpes, que por muchas lágrimas que caigan, muchos llantos que resuenen, sólo es por fuera, hay que mirar a fondo en los ojos, esos ojos negros que ocultan todo.
Ni siquiera yo sé qué pasa aquí, uno no dice nada, la otra dice demasiado. Quien bien te quiere te hará llorar. Yo no lo diría así, no se puede definir con palabras, no sé si quien lo lea lo entenderá, pero al menos yo sí, no es tristeza, no es rencor, ni odio, ni rabia, es un sentimiento que anteriormente no había tenido, no sé que es, al final lo acabaré sabiendo, eso espero.
Tantas vaciladas, tantos cabreos, tantos cambios de versión en tan poco tiempo, tantas cosas raras, tantas lagunas que tiene todo esto, me hace pensar y darle tantas vueltas a esto que al final me voy a marear, paren esta noria de una vez, dejémoslo todo claro, diciendo la verdad, sin ocultar nada. Dentro de un tiempo, volveré a leer esta entrada e intentaré ver qué a cambiado y qué no. Como puedo hacer ahora con cómo era hace un año y ahora, ojalá pudiera dar marcha atrás y borrar todos esos errores que cometí, que jamás podré arreglar, porque con un simple "perdón" no sirve. Repito, puede que él no lo vea, porque no me conociera antes, pero sólo quiero que él se meta en esa cabeza que lo ha conseguido, que todo lo que ha hecho ha servido, quizá para que funcionara tuviera yo que llorar y pasarlo mal, quien sabe, hay que aprender la lección, esta vida es un camino de rosas, puntiagudas, sangrientas y venenosas. Pero siempre habrá ese camino aún más doloroso que puede salvarte de que te caigas de la cuerda floja, aunque para ello tengas que sufrir por dentro, no por fuera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario